Esta es una historia real de alguien que siempre quiso buscar una puerta a la verdad, abierta al mundo de par en par. Intentó contener la emoción cuando, al fin, un buen día la vió. Se sentó, no respiró; complice de su tentación. Entrar con miedo de ser el primero, robarle al tiempo un solo momento, mirar por dentro qué es mejor: cerrar la puerta o no...
Pensaba que en Martos no iba a hacer tanta calor, me vengo de Sevila a mi lugar de residencia de la temporada verano con la esperanza de que los grados fueran más bajos, pero por el contrario las gotas de sudor empapan mi frente, el respaldo y el asiento de la silla... Martos, lugar en el que ensayar Expresión Corporal e Interpretación, asignaturas que le han quedado al 90% de mi promoción, lo han hecho para que no nos aburramos este verano, estoy seguro... pero bueno, en septiembre las tengo que aprobar como sea que quiero hacer "Siglo de Oro".
No me gusta el futbol, pero luego veré con todos mis amigos la final de la Eurocopa... cosas de la vida.
PD: Me dan miedo algunas personas... xD
Sed buenos. ^_^